Nos cansamos de escuchar que la Inteligencia Artificial y la automatización eliminarán muchos puestos de trabajo en los próximos años, parece que “las máquinas” son un ente al margen que viene a por nosotros de forma premeditada.

Si nos quedamos en estos titulares es complicado ver el lado
positivo a todo esto.

Está claro que el Machine Learning y su evolución hacia la verdadera
Inteligencia Artificial van a eliminar muchos puestos de trabajo, pero también van a crear otros tantos. De hecho, la empresa de investigación y consultora Gartner afirmaba hace unos meses que en 2020 la Inteligencia Artificial habrá creado 2.3 millones de puestos de trabajo y eliminado 1.8 millones. Más que de eliminación hablemos entonces de reinvención de los puestos de trabajo.
Esta reinvención permitirá a cada uno hacer lo que mejor se le da. Las máquinas son mejores que nosotros en el lenguaje natural, la capacidad de aprendizaje, el procesamiento, el cálculo o la identificación de patrones. Nosotros todavía somos mejores en el sentido común, la imaginación, la abstracción y en toda la parte emocional.
¿Os imagináis que somos capaces de combinar lo mejor de cada uno de nosotros?
Pues precisamente es en esta combinación de humanos e inteligencia artificial donde está la receta del éxito. En un proyecto de investigación liderado por la universidad de Harvard se demostró el éxito de la combinación de ambos en la detección de células cancerígenas. La inteligencia artificial conseguía una precisión del 92% en la detección de las células cancerígenas, el médico era capaz de tener una precisión del 96% y la combinación de inteligencia artificial y médico trabajando juntos alcanzaba una precisión del 99,5%.
Precisamente por esto parece mejor hablar de reinvención de puestos de trabajo y no de eliminación. Si hablamos de eliminación damos por hecho que es una realidad ante la que no podemos hacer nada, que no nos queda más remedio que aceptarla y buscar otra forma de generar ingresos. En cambio, la palabra reinvención es inclusiva, nos involucra en un proceso de transformación del que nosotros también podemos ser parte.

El esfuerzo no debería estar en aferrarnos a nuestro puesto de trabajo y resistirnos a la disrupción, el esfuerzo de las compañías que apuesten por la innovación debería estar en formar a sus empleados en estas nuevas tecnologías para conseguir encontrar el éxito de manera conjunta.

Si pensamos que la inteligencia artificial es como tener superpoderes…
¿A quién no le gustaría tenerlos?

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